y es que terminó muy pronto, o muy tarde. Me he levantado muy tarde, hoy no llegué a la primera clase. Tengo nuevas materias, nuevos maestros (sólo dos repitieron) y dos nuevas compañeras. Después del problema que tuve con ella no me encuentro, soy un nómada de asientos.
Hoy, la mañana me sentó muy bien, riendo, hablando, riéndome del buen profesor de Matemáticas; pero al llegar la hora de la salida, sólo quería llegar a casa. Dormir en el trayecto del subterráneo no es divertido, pasan muchas cosas y no es posible enterarse. El frío vuelve a sentirse, acompaño a mi mamá al mercado pero la dejo sola, que me pasa...
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1 comentario:
A veces uno esta presente en cuerpo pero no en esencia...
Odio dormirme en el metroide también, el sopor calenturiento de la gente me abochorna.
Pfff, igual amo la ciudad y el smog (H)
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